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Uno del Pueblo
Un Daimiel contundente y eficaz ante el gol, resolvió un partido de claro color blanco. La racha inicial en esta temporada del equipo del “Tato Giménez”, con tres victorias en los primeros tres partidos, acrecienta la ilusión de una hinchada cada vez más numerosa, con un estadio prácticamente lleno en tarde calurosa. Un partido sin demasiadas brusquedades, terminó con dos expulsados, uno por bando, por doble amarilla. Cosas del fútbol. Y la contundencia del marcador, con un cuatro a cero concluyente, no deja lugar a la duda. Este Daimiel funciona, este Daimiel promete.
En el inicio del partido, ya a los seis minutos pudo marcar Víctor para los locales, tras gran jugada de Rubén, centrocampista del Daimiel que cada partido se afianza y va a más. Buen pelotero este Rubén. Moraga, nazareno y goleador, (en el anterior encuentro), sacó una falta esquinada al borde del área con fuerte trallazo a puerta salvando la barrera, rechace de Marcelo meta visitante, y allí estaba Víctor con la caña preparada. Uno a cero y euforia en la grada. El C.D. Bolañego intenta rehacerse, pero siguen los blancos generando peligro y ocasiones. Una gran combinación en diagonal entre Almeida y Silva, desde un lado a otro del campo, gran belleza estética, es abortada por la defensa de Bolaños. Silva insiste por banda derecha creando mucho peligro, pero no hay acierto final. Astillero demuestra su calidad como cancerbero realizando un paradón al delantero visitante Rubén. A los treinta y dos, Mario remata tras buen avance de los daimieleños, se canta el gol, lo saca en última instancia la defensa y Marcelo el portero bolañego termina haciéndose con el esférico. Dos minutos después, el propio Mario remata de cabeza tras falta esquinada botada por el bueno de Rubén. Silva lo vuelve a intentar por activa y por pasiva, Moraga anda “sobrao” y llegamos al descanso, con clara superioridad del equipo daimieleño.
En la reanudación, a los tres minutos, el C.D. Bolañego disfrutaba de ocasión manifiesta fallada en boca de gol. Segunda amarilla posterior para Almeida y el Daimiel R.C.F. se queda con uno menos y mucho partido por delante. Adri la vuelve a tener ante el gol tras otra internada hasta la línea de fondo “made in Silva”, si bien el C.D. Bolañego presiona y aprieta con uno más. Pero la entrada de Kenji, futbolista que revoluciona el partido con su calidad, velocidad y regate en carrera, difícil de parar, origina un penalty claro, zancadilleado en el área, y Silva convierte en gol la máxima pena. Camacho es expulsado por la entrada al mencionado Kenji. En el ochenta y uno, jugadón otra vez de Kenji, que cruza medio campo en posición de delantero centro, se planta ante Marcelo y chuta al muñeco, recogiendo el rechace Adri Nieto que la enchufa sin dudar. Silva y Rubén elaboran un contraataque de libro para que Adri Nieto de nuevo golee entre el jolgorio de la grada.
Cuatro a cero concluyente de un efectivo Daimiel, sin exquisiteces, pero práctico y mandón. Lo más importante, además de competir, es ganar, pero si además el público se lo pasa en grande, miel sobre hojuelas. “La tatoneta” carbura, el quipo avanza y se afianza en su moral y en el fútbol coral que practican mientras la afición disfruta.
Arturo, el “Casemiro blanco”, da consistencia al centrocampo del “Tato”, Astillero, su hermano, es garantía y seguridad, bajo los palos, Mario, Hugo Soria, Víctor el avispado, Almeida, de sangre caliente y un super Mauri, junto a los Javi y compañía, nos hacen concebir sueños que están por llegar.
Este Daimiel R.C.F., de la mano de Jesús Vicente Giménez de los Galanes Aguirre, “Tato Giménez”, con plantilla de mayoría daimieleña, tiene muy, pero que muy buena pinta. Hasta el arco iris acompaña su trayectoria. Sensación de equipo fuerte y bien conjuntado. Doce goles en tres partidos.
¡VAMOS DAIMIEL!
