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Miguel R. Torres
El nivel del acuífero 23 en el pozo que habitualmente les informo, (pol 135, par 34), a fecha de 28 de febrero 23 se encuentra a 14.7 m. En el mes de febrero ha subido 30 cm, y en el mes de enero recuperó 40 cm. Se encuentra 1,1 m más bajo que en febrero del año pasado (13,6 m) y 5,1 m más bajo que en febrero de hace cinco años (9,6 m). No son buenos augurios para el acuífero en general ya que llevamos sin ver la lluvia mucho tiempo, y cuando lo hace es en cantidades ínfimas por esta región. Además se ha empezado a regar los cereales, cebadas, trigos, y ya han empezado el riego de cebollas; todo en el mes de febrero y marzo. Y lo que es peor, se siguen regando caminos, como la foto que adjunto lo demuestra, hecha el 11 de marzo 23.
Pero el problema no solo lo ocasionan los agricultores, si bien son los más declarados y achacados, sino todos los sectores de producción, como la industria, la población en general (higiene incluida) son mucho más consumidores (e incluso derrochadores) del líquido elemento.
Pero últimamente le ha salido otro gran “rival” a agricultores en el gran consumo de agua, éste es el Parque Nacional de Las Tablas (PNTD). Sí, otras veces lo ha sido pero no en la escala que ahora lo es. Cuando han terminado las obras de limpieza de algunas zonas de dicho Parque, que también han sido de ahondar el nivel del suelo entre metro y medio a dos metros, se ha llenado de agua y se ha publicitado a los medios y a los transeúntes y turistas con una esplendorosidad apoteósica. “Ya están llenas las Tablas y esplendidas”. Pues esas charcas se han llenado con agua del acuífero. Día tras día sacando agua los motores de varios pozos hasta rellenarlas y dejarlas por las pasarelas al paso del turista de forma envidiable; aunque más del 70% de su superficie esté completamente secas. Como dijera el tango de Carlos Gardel: “todo mentira”. Ahora, a fecha de 15 de marzo 23, esta charca presenta un aspecto envidiable, pero a esta fecha se le sigue aportando agua con pozo del acuífero, (desconocemos si también se exige caudalímetros); quizás sea ésta otra razón por la que en estos meses, enero y febrero, no se ha producido una mayor recuperación del nivel piezométrico del acuífero.
Y es que los tres Hm3 que se le han inyectado al PNTD por la tubería manchega en los últimos meses, son insuficientes.
Como han manifestado un grupo de quinientos científicos en un informe muy esclarecedor de la situación, se necesitarían 17 Hm3 al año. Si bien este informe apunta a hacerlo por el trasvase Tajo Segura, discrepo profundamente en esta forma, ya que si ha de venir por el Cigüela, hasta llenar las Lagunas de Villafranca y otras riberas, se mermaría más del 80% la cantidad. Ya tenemos experiencia en ello.
Deberían aportarse por la tubería manchega, donde la pérdida de agua es mínima. Así incluso con menos de esos diecisiete mil millones de litros serían suficientes. Como dice dicho informe, deberían implicarse las autoridades profundamente, pero dudo de ésta cualidad. ES TAREA DE TODOS SALVAR LAS TABLAS.
